Legal Design y yoga: un camino hacia la serenidad

Este mes es el Mes de la Salud Mental, un momento perfecto para reflexionar sobre las prácticas que nos ayudan a mantener el bienestar tanto personal como profesional. Hoy quiero compartir dos disciplinas que han sido fundamentales en mi vida en los últimos años: el legal design y el yoga. Aunque a primera vista parecen mundos muy distintos, cada vez encuentro más paralelismos entre ambos, y creo que hay mucho que aprender de estas conexiones.

El legal design y el yoga comparten algo esencial: ambos se centran en el ser humano, en su bienestar, en la empatía, en la creatividad y en el proceso de mejora continua. Ambas prácticas son una fuente de serenidad y equilibrio para mi día a día.

¿Qué es el Legal Design?

El legal design es la aplicación de los principios de design thinking en el ámbito legal. Se trata de abordar los problemas del sector desde una perspectiva centrada en el ser humano, haciendo que las organizaciones, los servicios y productos legales sean más comprensibles, accesibles y efectivos para quienes los utilizan.

Lo que me apasiona del legal design es cómo cambia la forma en que abordamos el derecho y la justicia. En lugar de seguir con procesos rígidos, se nos invita a ser flexibles, a colaborar y a poner las necesidades del cliente o usuario en el centro de la solución. Al igual que en el yoga, se trata de ser adaptable y fluido.

El Yoga: una Práctica de Equilibrio y Bienestar

El yoga es una práctica que va más allá de los movimientos físicos; integra la respiración, la concentración y la meditación para lograr un equilibrio entre cuerpo, mente y espíritu.

La flexibilidad que me ha proporcionado el yoga no solo es física, sino también mental. Me ha enseñado a mantener la calma en todo tipo de situaciones, a estar presente y a aceptar los desafíos como oportunidades para crecer. Estas son las mismas cualidades que trato de aplicar en el legal design.

Legal Design y Yoga: una comparación natural

A medida que profundizaba en ambas prácticas, descubrí que los principios de uno y otro se entrelazan perfectamente. En ambos, el camino hacia la solución o la mejora no es lineal; es fluido, iterativo y centrado en el bienestar del usuario o del practicante. Aquí hago un paralelismo entre las cinco fases del design thinking y las fases clave de una práctica de yoga:

1. Empatizar ↔ Anclaje

• Yoga: En el yoga, todo comienza con el anclaje, el “aquí y ahora”. Nos centramos en la respiración y nos conectamos con el presente.

• Legal Design: El proceso de legal design también comienza con la empatía. Ponernos en el lugar del cliente y entender sus problemas desde su perspectiva es clave para cualquier solución efectiva.

2. Definir ↔ Despertar

• Yoga: El cuerpo se despierta, se estira y se prepara para los movimientos más profundos.

• Legal Design: Definir el problema central nos permite enfocar nuestra energía en la raíz del desafío legal.

3. Idear ↔ Movimiento fluido

• Yoga: Este es el momento de movimiento dinámico, donde el cuerpo encuentra su fuerza, equilibrio, flexibilidad y creatividad.

• Legal Design: En esta fase, se generan ideas creativas, explorando distintas soluciones al problema previamente definido.

4. Prototipar ↔ Estiramiento Profundo y Relajación

• Yoga: Llegamos a las posturas profundas, liberando tensiones y permitiendo que el cuerpo se relaje.

• Legal Design: Se crean prototipos, se prueban versiones de la solución y se iteran según los resultados.

5. Probar ↔ Meditación

• Yoga: Finalizamos la práctica con la meditación, dejando que el cuerpo absorba los beneficios del esfuerzo realizado.
• Legal Design: Probamos las soluciones con usuarios, recopilamos su feedback y refinamos las propuestas hasta que sean adecuadas.

La Iteración: Un Camino Hacia la Mejor Versión de Ti Mismo

Tanto en el yoga como en el legal design, la iteración es fundamental. En el yoga, repetimos las posturas para profundizar en ellas y mejorar. En el legal design, las soluciones se prueban, se ajustan y se mejoran constantemente. Este ciclo de mejora continua es un recordatorio de que siempre podemos adaptarnos y crecer, tanto en lo personal como en lo profesional.

Reflexión Final: Salud Mental y Legal Design

La salud mental es un aspecto crítico de nuestra vida diaria, especialmente en el trabajo, y especialmente en el ámbito legal. En el legal design, al igual que en el yoga, la atención plena, la empatía, la flexibilidad y la creatividad no solo nos ayudan a resolver problemas, sino también a mantenernos equilibrados y serenos ante el estrés y la incertidumbre.

Este mes, dediquemos tiempo a cuidar nuestra salud mental, aprendiendo de disciplinas como el legal design y el yoga. Ambos nos recuerdan que la solución no siempre está en hacer más, sino en hacer mejor, en estar presentes y en mejorar de manera constante.

Artículo original publicado en Blog de Innovación Legal y Nuevas Tecnologías de Abogacía Española